12 años de truficultura en Navarra

Abstract

Navarra disfruta dentro de su superficie de una franja de producción natural de trufa negra en formaciones de carrascal. No es una superficie comparable a las extensiones de Aragón, Cataluña, Soria o de la Comunidad Valenciana, pero, sin embargo, si que ha despertado enorme interés y aprecio, por su valor y contribución a la diversificación de actividades agrícolas y forestales. El conocimiento de la trufa natural en Navarra es anterior a 1960. Se trataba de un recurso del monte no explotado por los lugareños. Fue en 1989, ante la influencia de personas llegadas de otras regiones y relacionadas con la trufa, cuando un grupo de agricultores se aventuró en la realización de plantaciones específicas orientadas para la producción de trufa, mediante el uso de plantas micorrizadas por la trufa negra. Este fue el inicio de la práctica de la truficultura en Navarra. Se realizaron algunas plantaciones y pronto los agricultores se asociaron en una Cooperativa de Truficultores. Fueron ellos los que demandaron un respaldo técnico al ITGA y posteriormente científico, con la entrada en colaboración de la Universidad de Navarra para estudios de campo. Es por ello que , desde 1992, el ITGA y el Departamento de Botánica de dicha Universidad trabajan en colaboración con un mismo objetivo: lograr que la Truficultura sea una realidad en la Comunidad foral. Para ello, se han desarrollado distintos trabajos de investigación en el marco de proyectos conjuntos, en los que se combinan aspectos técnicos y científicos y cuyos resultados van contribuyendo al avance paulatino de la Truficultura en Navarra.